777 bis Pont De Flandres, 59777 Lille
En el impulso contemporáneo del barrio de Euralille, el Hôtel Barrière Lille se destaca por una audaz silueta completamente revestida de vidrio. Detrás de esta estructura triangular de líneas tensas, la elegancia adopta una forma urbana, clara y fluida, en armonía con los ritmos de la ciudad. A pocos pasos de las principales estaciones de tren, se inscribe en el movimiento sin ceder nunca a la prisa. Encontrará aquí un lugar donde la sofisticación se mezcla con la discreción, propicio para un paréntesis de confort, ya sea breve o prolongado.
Desde los primeros pasos en el vestíbulo, se dibuja una atmósfera acogedora. Los materiales elegidos, la omnipresente luz natural, los generosos volúmenes y los detalles cuidados crean un universo discretamente lujoso. Todo aquí ha sido diseñado para crear una transición suave entre la efervescencia exterior y la calma interior. El mobiliario contemporáneo, las telas preciosas y los tonos suaves instauran un equilibrio tranquilizador. La decoración firmada por Pierre-Yves Rochon sugiere más que impone, dejando que la mirada se detenga.
Las habitaciones y suites, distribuidas en varios pisos, ofrecen vistas despejadas a los tejados de Lille o a las copas de los árboles del parque vecino. Gracias a los grandes ventanales, la luz penetra libremente, realzando los volúmenes y sublimando las líneas puras del mobiliario. Cada espacio presenta una paleta sobria, salpicada de detalles elegantes: cuero acolchado, cabeceros revestidos, grandes espejos murales. Encontrará aquí equipamientos modernos disimulados cuidadosamente, un generoso espacio de almacenamiento, un rincón de escritorio discreto y textiles seleccionados por su suavidad.
Para quienes buscan un alojamiento más espacioso, algunas suites disponen de un salón independiente, un baño prolongado con bañera o ducha italiana, y un panorama impresionante de la ciudad o los árboles del parque. Algunas también presentan una atmósfera artística, con guiños al universo del fotógrafo Maxime Dufour.
Los placeres de la mesa ocupan un lugar esencial en la experiencia que ofrece el Hôtel Barrière Lille. En el restaurante Les Hauts de Lille, los platos rinden homenaje a los productos de temporada en una interpretación creativa de la gastronomía francesa. La sala, bañada de luz, ofrece un entorno depurado que resalta la presentación de los platos. La brasserie La Terrasse du Parc ofrece un menú más generoso, entre recetas regionales reinterpretadas y fórmulas conviviales, especialmente durante los brunchs dominicales con toques musicales.
Durante todo el día, varios bares permiten prolongar la relajación o disfrutar de un momento más animado. L’Escal’777 seduce con sus tonos modernos y sus vistas al parque. El Bar Lounge, más íntimo, invita a una pausa entre dos partidas de juegos. El Café des Sports y sus variados aperitivos prolongan la experiencia del casino, mientras que otros espacios se animan según los conciertos y eventos nocturnos ofrecidos.
Uno de los mayores atractivos del establecimiento es su amplio espacio de bienestar. En el cuarto piso, el spa firmado por Cinq Mondes ofrece una gama completa de tratamientos: masajes, rituales de belleza, masajes personalizados… Cada gesto está pensado para proporcionar una sensación de equilibrio y relajación. El hammam, la sauna, la tisanería y la sala de fitness completan este universo de renovación. Se pone énfasis en los detalles, ya sean aromas, texturas o rituales a medida.
Otro universo, otra energía: la del casino. Distribuido en dos niveles, alberga más de 300 máquinas tragamonedas y varias decenas de mesas de juego. Podrá disfrutar del placer del azar en un entorno luminoso, dinámico, entre efervescencia controlada y una atmósfera de entretenimiento de alta gama. Un espacio VIP y varios bares temáticos completan la experiencia.
El teatro integrado al hotel constituye otro punto destacado del establecimiento. La programación, variada, incluye conciertos, obras de teatro, espectáculos y eventos artísticos durante todo el año. Basta con descender unas escaleras para acceder a un escenario de calidad sin salir de la comodidad de su alojamiento.
Varios servicios contribuyen a reforzar la sensación de atención constante. El desayuno puede tomarse en la sala o en la intimidad de su habitación. El servicio de aparcacoches, el alquiler de bicicletas, las estaciones de carga para vehículos eléctricos, el acceso Wi-Fi gratuito en todo el hotel, los equipamientos adaptados para personas con discapacidad evidencian el cuidado en cada aspecto de la estancia. Un centro de negocios también permite trabajar en un entorno tranquilo y bien equipado.
Sin ostentar su posición, el Hôtel Barrière Lille se dirige a una clientela exigente que aprecia los lugares concebidos en su globalidad. Parejas en escapada, viajeros de negocios, amantes de los espectáculos o de la arquitectura contemporánea encuentran aquí un refugio único en una ciudad en plena transformación.
Lille, en la encrucijada de influencias flamencas y francesas, ofrece un rico patrimonio a pocos minutos a pie del establecimiento. Desde el hotel, basta con cruzar las amplias explanadas modernas para llegar a las primeras calles empedradas del Vieux-Lille. Las fachadas de ladrillo, las tiendas exclusivas, las galerías y las librerías tejen un decorado propicio para el paseo.
La visita al Palacio de Bellas Artes, uno de los museos más ricos de Francia, se impone como una obviedad para los amantes de la pintura y la escultura. Más insólitos, la Casa natal de Charles de Gaulle o el museo del Hospice Comtesse ofrecen otras facetas de la ciudad, más íntimas, a veces sorprendentes.
En cuanto a la gastronomía, varias mesas lilloises han adquirido una excelente reputación por la calidad de su cocina y la fineza de sus combinaciones. Alejándose un poco, podrá descubrir la escena estrellada local u optar por una dirección contemporánea, entre espíritu de bistró y creatividad del mercado.
El Hôtel Barrière Lille también puede ser el punto de partida de paseos urbanos a medida. A pie, en bicicleta o acompañado de un guía privado, es posible descubrir los secretos de antiguas murallas, jardines insospechados, edificios Art déco o las nuevas galerías de arte. Otra forma de vivir Lille, más allá de los itinerarios clásicos, con la promesa de un regreso sereno a un hotel donde todo parece haber sido pensado para acompañar sus deseos con delicadeza.
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Desde 149 EUR por noche